Museo de la Alfarería Tinajera

Museo de la Alfarería Tinajera (Villarrobledo, AB)

Los museos son los más fieles guardianes de los testimonios e historias de la humanidad. En La Mancha, el vino ha sido siempre la pieza fundamental sobre la que se sostienen las bases de su cultura, tradiciones y economía. Es por ello, que la comarca cuenta con varios museos en los que se conserva, investiga, comunica y se expone el patrimonio (material e inmaterial) del vino de La Mancha. Es el caso del Museo de la Alfarería Tinajera de Villarrobledo (Albacete).

Durante siglos, esta localidad albaceteña fue un referente mundial en la fabricación de tinajas de barro, utilizadas como recipiente para la conservación del vino. Un pasado de un oficio milenario, que en la actualidad se reivindica con la puesta en marcha de este museo. Inaugurado en 2008, se enclava en un antiguo alfar y horno tinajero; ambos rehabilitados y acondicionados, aunque conservando su diseño antiguo.​

Su interior se divide en tres espacios diferenciados. El primero, El obrador, posee los utensilios necesarios en el proceso de elaboración de tinajas; de principio a fin. La segunda estancia, La olla de combustión, conserva sus paredes vitrificadas originales, las cuales soportaban las altas temperaturas alcanzadas en el proceso de cocción. Finalmente, El horno de cocer tinajas, se ubica en la tercera estancia mostrando, tal y como reza el nombre, el lugar donde se cocían las tinajas.

El visitante podrá adentrarse en uno de los más interesantes oficios vinícolas, cuyo proceso de conservación de vino en tinajas, aún lo llevan a cabo algunas bodegas de La Mancha. Su recorrido, con visitas guiadas y demostraciones, ilustra sobre todas las fases necesarias para crear las tinajas desde sus inicios; desde el lugar donde se extrae el material, los barreros. También la extracción de la arcilla y el tratamiento que necesita para poder ser utilizada, así como su amasado.

Posteriormente, en su paso por el alfar y el horno, se pone en valor el duro trabajo que realizaban los alfareros de antaño. Un proceso de elaboración de colosales tinajas, que necesitaban enormes esfuerzos físicos y conocimientos previos. El Museo de la Alfarería Tinajera es, en definitiva, un lugar que transporta al viajero al pasado. Y es que, durante siglos, este oficio encumbró la localidad de Villarrobledo. Se convirtió en todo un referente mundial de tinajas de calidad, fruto de la sabiduría y el buen hacer de multitud de generaciones.

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